Concejales no electos. Jardines efímeros y demagogía de congelador.

El concejal no electo surge con la ley de las grandes ciudades. Dicha ley contempla esta figura, en  poblaciones superiores a los 250.000 habitantes o capitales de provincia, a fin de reforzar las labores del grupo de gobierno. En Pontevedra Luís Bará forma parte del gobierno municipal como concejal no electo. El partido popular llegó a decir que el Concello se había convertido en la oficina de empleo del Bloque, ya que ocupaba cargo político en la Xunta y en las elecciones del 2009 los ciudadanos decidieron que no lo querían en ese puesto. No profundizaremos sobre el asunto, pero dicen que parece  fraude de ley, pues se especifica claramente que el concejal no electo ha de ser cualificado para las labores especificas. Las reformas urbanas a las que se dedica, nada tienen que ver con sus experiencias. De difusión cultural a jefe de obra, (lo mismo plancha un huevo que fríe una corbata) No fue la oposición sino algún colectivo vecinal el que lo calificó como comisario político, pero de obras.

 La cuestión es que esta figura, se está poniendo en boca de dirigentes ante los descontentos y malestares con sus listas electorales. No se puede agradar a todo el mundo, además en política se queda fuera el que mas trabaja. Eso crea turbulencias, al final resulta que la tan criticada figura de concejal no electo va a dar mucho juego en este ayuntamiento.  No descartemos sorpresas, al que pillan rebotado/a le dicen “a ti te hacemos como a Bará”, hay cola.

Jardines efímeros, demagogia de congelador.

Lo único mas hermoso que una flor, es un montón de flores...Tenemos unos bellos jardines instalados temporalmente, en plazas de la ciudad. Han generado todo tipo de opiniones. Se dice que están realizados por una empresa con la que el concejal Raimundo cometió una irregularidad o ilegalidad (lo que diga el juez) No es  cierto,  ya que son diferentas empresas junto a brigadas municipales. Se ha comentado lo inadecuado de la fecha, ya  que se trata de una exposición de cinco días, y en los festivos de mayo o en la cercana semana santa harían disfrutar también a nuestros visitantes, la instalación en nada afectaría a los recorridos procesionales. El planteamiento es “ya que se hace, saquemos mas rendimiento”. Una cuestión muy comentada es la del gasto, la situación económica hace que muchas actuaciones se tomen como despilfarro. Tenemos los rotondas e isletas llenas de flores exóticas, mientras que en algunas calles de Monteporreiro la maleza  se come a los vecinos y no digamos en el rural. Cuentan que son la empresas las que corren con los gastos de estos jardines, pero las brigadas municipales las pagamos todos. La demagogia está servida, es como el caso de la Plaza de abastos. Se celebran actos de animación y los vendedores dicen “que dejen de gastar dinero en titiriteros y arreglen el congelador que lleva años averiado”. Tal y como está el panorama, alguien tendrá que poner un poco de sentido común y explicar lo que significa priorizar.

Lo curioso es que en el diario digital se habla de inauguración de los jardines y añaden fotos del alcalde, si fuera así, la junta electoral tendría algo que decir.