Celulosas.

Se trata de un asunto que requiere mucha reflexión para un posicionamiento responsable, por eso decir que es con un miembro del comité de empresa, con quien hemos mantenido gran intercambio de impresiones. Estos días celebran jornadas reivindicativas y nos queremos solidarizar con los trabajadores en la defensa de sus derechos.

Vamos a ser claros, el traslado de celulosas es uno de los grandes consensos que debe lograr la ciudad. Primero fue el BNG y el PSOE los que plantearon su traslado, con la llegada de Telmo Martín el PP se une a esta postura. Los tres partidos que representan a los pontevedreses quieren que la factoría abandone su ubicación. Existe una concesión y una fecha limite, todos tendrían que ponerse a trabajar para que esta importante industria se quede en la comarca. Se sabe que el anterior gobierno de Touriño tuvo contactos muy avanzados con el concello de As Pontes, el actual gobierno de Feijoo sigue hablando con los propietarios, movimientos con mucho ocultismo. Touriño prometió una mesa de trabajo pero no se llegó a formalizar. Los tres grupos municipales tienen el mismo criterio, comparten la idea del traslado, sin embargo no son capaces de abordar el asunto con responsabilidad.

Nuestra postura es clara, la misma que comparten los tres partidos del concello, el 2018 se acaba la concesión y es la fecha final de la actual ubicación. Pero vamos a exigir responsabilidad, trabajar para que una industria que ha generado y genera muchísima riqueza, siga en la comarca con los puestos de trabajo que tantas familias pontevedresas necesitan. Exigimos altura de miras, hay que encabezar desde aquí un frente común. Debe ser desde Pontevedra, desde donde se trabaje para un traslado dentro de la comarca. Hay que implicar a todas las administraciones, posibles grupos financieros y hasta la universidad, la facultad de forestales tiene mucho que decir. Si se hubieran puesto de acuerdo para llevarse la fábrica a As Pontes, Pontevedra se resentiría economicamente de una manera dramática. Con los tiempos que corren es una necesidad urgente que se pongan a trabajar.

El actual gobierno municipal lleva más de 10 años gobernando y no ha hecho nada, la falta de decisiones puede convertir el traslado en un cierre definitivo. Los propietarios estudian otra ubicación pero hay quien dice que si no encuentran los apoyos necesarios podrían aumentar su producción en otras factorías y olvidarse de Pontevedra. Aprovecho para decir que tampoco nos parece responsable esa campaña que no quiere esperar y pretende cerrar la fabrica “ahora”, es muy fácil lanzar frases pero detrás de todo esto hay muchos puestos de trabajo de los que dependen personas, familias, vecinos, amigos y Pontevedra entera.